Bajo el mágico lema "El universo de los colores", el Colegio Arenas celebró este sábado, 26 de abril, su XL Olimpiada, un evento que, además de reunir a toda la comunidad educativa, se impregnó de emoción y alegría para conmemorar los 85 años de historia del Colegio Arenas, los 30 del Conservatorio Arenas Albéniz y los 20 del Arenas Atlántico en Arucas.
9 may. 2025
Desde primera hora, el ambiente en las instalaciones deportivas de Los Tarahales se llenó de entusiasmo. El acto, presentado por Teresa Santana y Pino Afonso, directivas de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato, dio paso a un pregón muy especial a cargo de Francisco Germán Hernández Naranjo, padre de la alumna encargada de encender el pebetero, lo que añadió un emotivo vínculo entre familia y colegio en este simbólico inicio de la Olimpiada.
La ceremonia contó con la presencia del alcalde de Arucas, Juan Jesús Facundo, que acompañó al Presidente de los Colegios Arenas Alberto Rodríguez y al Director Gerente de los mismos Jaime Rodríguez, acompañado a los directivos y demás autoridades que conformaban la mesa presidencial del Acto Central de las Olimpiadas, que este año llega a su a su cuadragésima edición.
Tras la entrada de la bandera olímpica portada por el alumnado de 2º de Bachillerato, acompañado por el abanderado e invitado de honor de esta edición: el regatista internacional Rafael del Castillo Palop, continuó el acto con las actuaciones de la Orquesta de Enseñanzas Elementales y el Aula Pop-Rock Instrumental del Conservatorio Arenas Albéniz, que emocionaron al público con interpretaciones de "In the Hall of the Mountain King" de Grieg y "Wake Me Up" de Avicii, antesala perfecta de una jornada vibrante.
Y es que en esta ocasión, el mundo del circo, los ositos de colores, las pinturas multicolores, los elefantes, los tableros de parchís, los cubos de Rubik y las paletas de pintores llenaron de vida y fantasía cada rincón del Colegio. El vestuario, cuidado hasta el mínimo detalle, junto a la excelente participación del alumnado, creó cuadros coreográficos y dramatizaciones en las que se simbolizaba la fusión de la luz y la oscuridad, de la tristeza a la felicidad, llevándonos al país del Arco Iris.
No faltaron tampoco las tradicionales colaboraciones de madres y profesoras, quienes volvieron a regalar al público un entrañable baile, demostrando que el espíritu de la Olimpiada une generaciones.
Uno de los momentos más emotivos y esperados fue el encendido del pebetero, a cargo de la alumna Andrea Carolina Hernández Domínguez, en quién recayó este honor como reconocimiento su excelente trayectoria personal y académica. Completaban la triada, las alumnas Johana González Luján y María García Herrera.
Como broche de oro, el cielo se iluminó con pirotecnia silenciosa, fuegos artificiales de bajo impacto sonoro, respetuosos con el medio ambiente y con las personas y animales sensibles a los ruidos. Una explosión de luz y color que simbolizó el espíritu alegre, diverso y solidario de esta edición.
La jornada concluyó con un gran baile final del alumnado, al que se unió el público presente, rindiendo homenaje a los aniversarios que este año enmarcan la historia y evolución del Colegio Arenas.